Aunque nadie lo sepa

Un nacimiento verbal, un juego de libertad y naturaleza pensada, un sentimiento.

martes, 3 de julio de 2012

Otra noche sin sol

Su cabeza siempre volvía a los argumentos como método evasivo, era un holocausto de autonegación, pero las circunstancias eran cada vez más frías hasta el punto, de congelar las palabras... En el fondo, él sentía una mezcla de esperanza y resignación a partes iguales, donde la esperanza madrugaba y la resignación le arropaba por las noches... Pero todo lo que pasaba por su cabeza era escupido en sonrisas irónicas, por que él, sabía que en su templo, volvería a ser fuerte... 
Sus manos bailaban con el bolígrafo al ritmo de la tinta, mientras, los monstruos se despegaban de las paredes de uno en uno para leer con atención lo que la lógica dejaba a la imaginación, para después, esfumarse en la oscuridad de otra noche sin sol...
Mi Sol, Mi Sol... el acorde se repetía en sueños de cuatro por negra, pero siempre desafinando en la reciprocidad, egoísmos inclasificables llenos de melodías francesas y escapadas en solitario, donde la ilusión se materializa en la persona que no esperas... 
Y de nuevo aquí, mirando al cielo en mañanas que hasta las nubes te recuerdan su cara de media sorpresa, o sus erres en voz baja... de nuevo aquí, adaptándome a mi vida de siempre, a lo mágico de lo cotidiano, a esa seguridad incierta que pende de los hilos eléctricos que mutilan mis latidos, o al menos, los que no son de ella...

Tú tan grande, que me cuesta llenarte de palabras.
Yo tan pequeño, que me queda grande lo de poeta.
Se nos acaba el aire, se nos extingue el fuego... 
Ven!, ocupa mis comisuras borrachas,
róbame el aliento y la fuerza, 
y no dejes, que escriba lo que venga luego...
Tú tan grande, que me cuesta llenarte de palabras.
y yo, tan pequeño...

No hay comentarios:

Publicar un comentario